(Dreamcast)
Como lo prometido es deuda, con el paso del tiempo este blog adquirirá secciones nuevas, así como la inauguración sobre los juegos que han traído gratos recuerdos y queremos volverlos a resucitar, mejor dicho, traerles un gran repertorio, me gustaría rescatar juegos de consolas extintas como SNES, NES, inclusive de la que hablaré hoy es Dreamcast de la misma compañía SEGA. El juego al que se le dará tributo es MSR. Metropolis Street Racer.
Metropolis Street Racer se puede considerar como el Need For Speed que le abre las puertas al siglo XXI en el mundo de SEGA, podemos decir que MSR rescata diversos ambientes del mundo en los que se descuida mucho el abuso de la velocidad y uno que otro peatón distraído. De hecho, existen diversas modalidades de juego que nos ponen a prueba la habilidades que tenemos de conductores (aquí podemos ser mejores que el fantoche de Brian O’Conner, XD), contamos con Street Race; en donde desafiamos a varios contrincantes; Timed Run que nos pone a prueba para romper el record propuesto en la primera vuelta o en las otras si todavía no lo rompemos, y para concluir un campeonato en donde les podemos cantar la tabla a los mismos contrincantes, y uno que otro desafío se irá mostrando.
En cuanto a los vehículos contamos con diversas marcas como Toyota, Mazda, Mercedes, Alfa Romeo, Renault, Rover, y paremos de contar. Recorreremos ciudades como Londres, San Francisco, y la exuberante Tokyo que nos muestran diferentes rutas que al comienzo las podemos pasar con los ojos cerrados pero luego se nos pondrá alta la batea, y a medida que vayamos corriendo podemos hacer una maniobre de derrape en donde se mostrará una “K” que a medida se va definiendo, esa K se llama “Kudos”, es un puntaje que vamos ganando para desbloquear mas niveles que desarrollaremos mas tarde, pero hay que tener cuidado porque si chocamos, se descontará el puntaje, un consejo, juguemos el Timed Run, después de romper dicho record podemos gastarnos el tiempo que queramos maniobrando para ganar puntos.
El juego tiene un contexto muy realista en cuanto al calibrarlo con la hora exacta del mundo, con el meridiano de Greenwich, y también podemos jugar con la hora real de cada ciudad, en compañía de diferentes cambios de clima, dependiendo de éste, le podemos arreglar la capota a algunos de los cacharros, o incluso a nuestra preferencia. Sin embargo, dichas características previamente mencionadas puede afectar el control vehicular.
Y para concluir, la sección musical contiene diferentes “soundtracks” como para uno quedarse horas y horas devorándose este titulo, la música varia con el contexto de los ambientes, es decir, cada ciudad tiene su género musical, como Jazz, Rock, Pop y Electrónica, y existe una opción que podemos crear nuestras propias compilaciones las canciones de nuestra preferencia. En realidad este juego es muy bueno y adictivamente tentador.
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